RITA LUNA
El canto del cisne
INFORMACIÓN
Una vieja gloria del teatro pisa las tablas por última vez y al terminar la función bebe hasta quedarse dormido. Cuando despierta se da cuenta de que han cerrado el teatro y lo han dejado solo.
Chejov crea este personaje para mostrarnos la decadencia que conlleva el paso del tiempo para quienes han estado en la cima de la gloria y que, de repente, sin saber muy bien cómo, se dan cuenta de que han llegado al final del camino.
Vasil Vasilich, el otrora ídolo del público, repasa sus muchos años sobre el escenario con la sinceridad descarnada que nace del desengaño.
La aparición de un personaje inesperado -el apuntador- propicia que el actor nos descubra la soledad que puede esconderse bajo los ropajes del éxito.